Profetas, el llamado

Profetas

Muy popular se ha vuelto en la última década el tema profético entre las naciones de la tierra. Pero tengo cierto sinsabor en la boca, por el hecho de que solo una minoría ha entendido su significado, y son pocos los que cumplen con la urgencia de la hora, en su rol como Profetas.

Al rescate del ministerio Profético, nos lanzaremos en esta enseñanza.

Un profeta es: Una persona que es ENVIADA de parte de Dios, para HABLAR a los hombres su voluntad. Una palabra bastante similar en su significado es exhortar.

La profecía nace directamente del propósito de Dios con la humanidad, y no del razonamiento intelectual de los hombres acerca de los tiempos. Esto va más allá de un simple anuncio futurista, es ministrar a los hombres las emociones, el sentido y el corazón de Dios, acerca de determinada circunstancia. 

Jesús tardó 30 años en ser enviado al ministerio, Juan el Bautista 18 años en el desierto, los discípulos aprox. 3 años y la lista es larga. Cada voz que Dios ha levantado a lo largo de la historia, ha tenido un buen tiempo de entrenamiento. Dios no hace comidas instantáneas, ni tiene un microondas para madurarte velozmente, el quiere usar a hombres y mujeres que se dejen moldear en sus manos, y soporten el proceso con paciencia y devoción hasta ser, auténticamente enviados por El.

Ezequiel 2: 7 al 3: 4, 14

2: 7 Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son muy rebeldes.

8 Mas tú, hijo de hombre, oye lo que yo te hablo; no seas rebelde como la casa rebelde; abre tu boca, y come lo que yo te doy.

9 Y miré, y he aquí una mano extendida hacia mí, y en ella había un rollo de libro.

10 Y lo extendió delante de mí, y estaba escrito por delante y por detrás; y había escritas en él endechas y lamentaciones y ayes.

3: 4 Me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a la casa de Israel.

2 Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo.

3 Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre, y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy. Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel.

4 Luego me dijo: Hijo de hombre, ve y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con mis palabras.

14 Me levantó, pues, el Espíritu, y me tomó; y fui en amargura, en la indignación de mi espíritu, pero la mano de Jehová era fuerte sobre mí.

Jeremías 15: 16-18 y 19-21 (llamado profético)

16 Fueron halladas tus palabras, y yo las comí; y tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón; porque tu nombre se invocó sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos.

17 No me senté en compañía de burladores, ni me engreí a causa de tu profecía; me senté solo, porque me llenaste de indignación.

18 ¿Por qué fue perpetuo mi dolor, y mi herida desahuciada no admitió curación? ¿Serás para mí como cosa ilusoria, como aguas que no son estables?

19 Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos.

20 Y te pondré en este pueblo por muro fortificado de bronce, y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo para guardarte y para defenderte, dice Jehová.

21 Y te libraré de la mano de los malos, y te redimiré de la mano de los fuertes.

Examinar las profecías a la luz de la palabra, entenderla y conocer realmente al Señor.

Una vez crecidos en palabra seremos capaces de profetizar en base a ella.

Josué 1: 8-9

8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

Comernos la Biblia para cantarla, orarla, hablarla y predicarla. Eso es profetizarla.

Otra definición de profeta es aquel que siembra una palabra que burbujea hasta que sale a la luz.

Comer el rollo involucra un gran esfuerzo, tiempo, dedicación y enfoque.

Meditar la palabra.

Ap 10:

9 Y fui al ángel, diciéndole que me diese el librito. Y él me dijo: Toma, y cómelo; y te amargará el vientre, pero en tu boca será dulce como la miel.

10 Entonces tomé el librito de la mano del ángel, y lo comí; y era dulce en mi boca como la miel, pero cuando lo hube comido, amargó mi vientre.

11 Y él me dijo: Es necesario que profetices otra vez sobre muchos pueblos, naciones, lenguas y reyes.

Devora el rollo se le dice a Juan, es decir, trágalo con ansia.

El mensajero profético habla del regreso de Jesús, ése es su enfoque y sus profecías giran entorno a ese día y un profundo entendimiento del mismo, es decir, de los justos juicios de Dios.

El Señor nos insta a comernos su palabra no solo intelectualmente, sino que esa palabra legue a convertirse en parte de nosotros, que viva en nuestros cuerpos y se mueva a través de nosotros.

 No se trata de recitar versos como loros, somos llamados a experimentarlos desde lo más profundo de nuestro corazón, ser tocados y transformados no solo por la dulsura y frescura que estos traen. Ciertamente las promesas y bendiciones al obedecer la palabra son dulces y nos llenan de esperanzas, pero una persona que no ha vivido lo amargo que es muchas veces tomar la cruz y seguir al Señor, recibiendo la responsabilidad de ser un portador de su palabra, nunca estará listo para confrontar naciones y reinos físicos y espirituales, con la autoridad y el poder de Jesús. 

Nos acercamos a tiempos malos, y solo aquellos que Dios ha estado preparando a lo largo de años, con profundo conocimiento de la persona de Jesús y humildad en su carácter, podrán brillar trayendo entendimiento en el tiempo de mayor oscuridad en la historia de la humanidad.

 La expresión máxima de la simiente de la serpiente (el anticristo) pronto se hará notoria en las naciones de la tierra, y sólo una iglesia a la estatura de la simiente Santa de la mujer (Jesús) podrá hacerle frente y salir victoriosa. 

Génesis 3: 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.

Lo que profetizo Daniel estuvo sellado hasta Juan, o mejor dicho se le reveló a él, y lo que fue sellado para Juan en Ap 10, con la voz de los 7 truenos será revelado o destapado ante nuestros ojos en los últimos días.

Salmos 19: 9-11

El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre;

Los juicios de Jehová son verdad, todos justos.

10 Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado;

Y dulces más que miel, y que la que destila del panal.

11 Tu siervo es además amonestado con ellos;

En guardarlos hay grande galardón.

El apóstol Juan no estaba escribiendo algo innovador, David escribió en salmos al respecto, solo que a Juan se le permitió experimentar físicamente lo que ocurre con un hombre al que Dios elige para impactar su entorno.

1 Timoteo 4: 11 

11 Esto manda y enseña.

12 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.

Tu mensaje te salva a ti y al que te escucha.

Solo hombres como Juan el bautista podrán preparar el camino al Señor.

Jeremías 20: 7-11

7 Me sedujiste, oh Jehová, y fui seducido; más fuerte fuiste que yo, y me venciste; cada día he sido escarnecido, cada cual se burla de mí.

8 Porque cuantas veces hablo, doy voces, grito: Violencia y destrucción; porque la palabra de Jehová me ha sido para afrenta y escarnio cada día.

9 Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no pude.

10 Porque oí la murmuración de muchos, temor de todas partes: Denunciad, denunciémosle. Todos mis amigos miraban si claudicaría. Quizá se engañará, decían, y prevaleceremos contra él, y tomaremos de él nuestra venganza.

11 Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada.

Si El Señor te eligió para esto, no tienes escapatoria, es tu sello y destino, no podrás volver jamás al mismo “cristianismo complaciente”. No te será posible huir, él ha metido un fuego dentro de ti que te consumirá y no podrás resistirte al llamado. Nunca más podrás predicar con el enfoque de simplemente entretener y distraer las ovejas.

Aunque corramos nos alcanzará, Dios ha hecho una elección. Amenazas, murmuraciones y persecuciones deben estar en nuestro presupuesto, si no queremos ser ofendidos en el camino de nuestra encomienda. 

La mayor de todas las oposiciones se levantará en tu contra al caminar, pero nada de eso podrá hacerle frente a quien va delante de ti, no te detengas El es poderoso gigante delante de ti y prosperará tu caminar.

Animo valiente! Que el reino de los cielos sufre violencia, dentro y fuera de los sistemas religiosos, guarda tu corazón y verás tu recompensa.